Somos - Lo que necesita - Su proyecto

Su proyecto

Lo hacemos nuestro

Porque el éxito de su proyecto es beneficioso para nosotros también, nos implicamos a fondo en su desarrollo. Desde el comienzo del proyecto hasta el término del mismo. Etapa por etapa.

1. ESCUCHAMOS

Usted nos expone y explica qué quiere hacer, cuáles son las necesidades del proyecto, qué funcionalidades necesita, qué ideas tiene, cómo funciona su negocio u organización. Si lo tiene claro y sabe exactamente lo que quiere, elaboramos el plan de trabajo y comenzamos. Si sabe lo que quiere, pero aún no lo tiene claro, vayamos al paso 2.

2. PROPONEMOS

Con los requisitos en mano, le preguntamos por su modelo de negocio, por el funcionamiento de su empresa, la audiencia a la que se dirige el proyecto, por todos los parámetros que pueden entrar en juego. Sumamos nuestra experiencia y nuestra visión, y aportamos ideas y soluciones que creemos pueden mejorar el producto.

3. TRABAJAMOS

Una vez establecidos los requisitos finales, y analizadas las mejoras propuestas (si es que venimos del paso 2), elaboramos el plan de trabajo definitivo, y nos ponemos manos a la obra. A medida que avance el proyecto y se vayan alcanzando los hitos marcados, le mantendremos al tanto para ir revisando y analizando estos hitos.

4. MODIFICACIONES

Durante el proceso de desarrollo o de revisón de los hitos marcados, pueden surgir modificaciones, adaptaciones o cambios. Bien porque surgen ideas o necesidades nuevas, bien porque el escenario en el que el proyecto había de desenvolverse ha cambiado. Analizamos e intercambiamos opiniones. ¡Los proyectos están vivos!

5. LISTO

Hayamos pasado o no por la temida etapa de modificaciones, el producto está listo para una primera presentación interna. Una versión beta. Se prueba, se analiza, se detectan fallos, comprobamos que todo funciona como debería hacerlo. Quizás incluso podamos añadir alguna pequeña modificación de última hora.

6. CALIDAD

Ahora que parece que todo funciona como debe ser, estamos preparados para poner el proyecto en marcha. ¿Seguro? No. Antes hay que sacar la regla y medir. Hay que evaluar el cumplimiento de los estándares, hay que medir los parámetros de calidad que definen si de verdad el proyecto está listo para ponerse en marcha. Herramientas de evaluación automatizadas e independientes, test externos, webs de análisis, medidas de rendimiento… Todo lo necesario para decidir si la calidad del proyecto es la que queríamos alcanzar, o por el contrario hay que afinar todavía más. Y siempre con herramientas de terceros, para que el análisis sea de verdad independiente.

7. ARRANQUE

Si hemos llegado aquí, entonces es que de verdad estamos listos para presentar el proyecto en sociedad. Sincronicemos relojes y acciones publicitarias, preparemos los correos, ¿fiesta de presentación? No hace falta que crucemos los dedos, si hemos llegado aquí, es que está todo preparado :)

8. DATOS

Datos como las estadísticas de visita, usuarios registrados, posicionamiento, datos de venta, rendimiento, retorno de la inversión, etc., nos ofrecen una medida exacta de cómo se desarrolla la vida útil del producto. Y el análisis de estos datos ofrece información fundamental para conocer si los objetivos marcados se cumplen.

9. FINAL

Tras la puesta en marcha del proyecto y el análisis de los datos iniciales, tenemos el producto 100% operativo, funcionando y cumpliendo los objetivos que se marcaron en las fases iniciales del mismo. Hemos llegado al final. Pero los tiempos cambian, la tecnología avanza, los clientes evolucionan... ¿Podemos decir que hemos terminado aquí?

10. EVOLUCIÓN

El diseño, la tecnología, los usuarios, cambian. Todo evoluciona. Surgen nuevas opciones, nuevos retos. La información obtenida a través de los parámetros y datos del paso 8 puede avisarnos, orientarnos, respecto a los cambios que están sucediendo en la red y al otro lado de la red. ¿Qué eran las redes sociales hace cinco años? ¿Lo recuerda? ¿HTML5? ¿Responsive Design? ¿la nube? ¿Y si las palabras clave que escogimos inicialmente para posicionar su web ya no resultan ser tan relevantes? El mantenimiento evolutivo permite, en el caso de productos con un ciclo de vida prolongado como webs o aplicaciones, adaptar el producto a los cambios de mercado, de tendencia y tecnológicos. No sobrevive el más fuerte, sino el que mejor se adapta.